Una uña rota es incómoda, inconveniente y puede llegar a ser incluso dolorosa cuando se atora en algún lado. Es importante solucionarlo a tiempo para evitar lastimarse o que se expanda la grieta.
La forma más sencilla de resolver esta inoportuna situación es cortando y limando la uña, sin embargo, sabemos que a veces se prefiere tener uñas largas.
Existen diversos métodos para arreglar una uña natural rota, desde utilizar materiales caseros hasta otros más especializados.
Comenzaremos mencionando las tácticas que podemos llevar a cabo con cosas que tenemos en casa.
Bolsita de té
Necesitarás tijeras, una bolsita de té vacía, barniz, pinzas pequeñas y lima de uñas.
Si tienes pintauñas, el primer paso es removerlo. Después recorta un pedazo de la bolsita de té de un tamaño que cubra gran parte de tu uña.
Aplica una capa de barniz en la uña y coloca la bolsita encima con las pinzas para mayor precisión y para evitar mancharte.
Una vez seco, lima para emparejar la uña. Coloca una capa de esmalte de color si quieres que se disimule aún más.
Si no tienes bolsitas de té puedes reemplazarla con un filtro de café, con papel o con servilletas de cocina.
Cinta adhesiva
Este modo de arreglar a uña es el menos resistente pero aún así logra solucionar de forma rápida el problema y además es muy fácil de hacer.
Utilizarás cinta adhesiva transparente, tijeras y esmalte.
Coloca un pedazo de la cinta sobre la uña y recorta los excesos. Al ser adherente, no tienes que aplicar nada antes, sólo se recomienda asegurarse de que la uña esté limpia y seca.
Aplica una capa de esmalte sobre la uña para esconder más la cinta.
Para las siguientes formas de arreglar una uña, vas a requerir ciertos materiales más especializados que no necesariamente tendrás en casa, no obstante, son bastante prácticos y podrías considerar adquirirlos para futuras ocasiones.
Uña postiza
En caso de que la uña se haya desprendido por completo o que se te dificulten los métodos anteriores, la uña postiza es una buena opción para camuflar una uña rota.
Puedes ponerla únicamente en la uña afectada y ajustar la medida para que quede pareja con las demás.
Sólo tienes que colocar pegamento para uñas, asegurándote primero de que no tengas esmalte y que esté seca la uña. Sitúa la uña postiza y aplica un poco de presión hasta que seque.
Con un cortauñas o lima modifica la forma a tu gusto, después píntala con esmalte.
Bicarbonato
Los materiales necesarios son pegamento de uñas, bicarbonato de sodio, un palillo de dientes y una lima.
Retira el esmalte que tengas puesto, limpia la uña y sécala bien. Posteriormente usa el pegamento sobre la parte rota y expárselo con un palillo.
Sumerge la uña en un plato o frasco lleno de bicarbonato y corrobora que la parte rota esté bien cubierta.
Retira el exceso de bicarbonato y con la lima alisa y empareja la uña una vez seca.
También puede realizarse con sal o con maicena.
Polvo para relleno de uñas
Igual se le conoce como polvo acrílico. A parte requerirás pegamento para uñas y una lima.
Aplica una capa de pegamento en la uña rota y sumérgela en el polvo. Espera a que se seque y lima la uña.
Puedes repetir el proceso un par de veces si quieres que quede más firme. Este método es de los más resistentes y duraderos.
Las uñas quebradas generan malestares estéticos y son fastidiosas, pero igual son un indicio de que algo está pasando en nuestro sistema.
Te sugerimos acudir con un especialista si es un problema que te sucede seguido.